jueves, 3 de junio de 2010

criticando ota es

El Tambo Huancayo; año 2008, tras haber tenido algunas malas experiencias en una relación de casi tres años, decidí irme de la ciudad, quería escapar; con una vida un tanto exagerada a lo Martín Romaña quise meter mi cabeza al inodoro para no salir más y ahogarme entre mis porquerías (suena algo asqueroso). En casa todos angustiados por que el loco del hijo menor, el hermano menor se atragantaba con su propia porquería en lugar de expulsarlo o hacerse un lavado gástrico. Mientras tonto, digo, tanto, en mi barrio las cosas se ponían de cabeza, en una cuadra cercana a mi casa después de como 15 años o más, desde que llegamos al lugar, la "modernidad" nos tocaba las puertas, y es que ya teníamos cabinas de Internet, video juegos, tiendas etc. pero no teníamos ninguna puta pista asfaltada, pero un alcalde que se auto denomina el alcalde chamba ya nos estaba regalando ésa alegría que se iniciaba mas o menos en el mes de agosto.

Lima 31 de diciembre del 2008; en un trabajo en el que no dejaba de pagar piso, ahí mismo en el centro de "lema", casi al lado de congreso de la república, donde trabajé hasta de estibador cargando objetos que pesan más que yo; me revelé contra mi jefe y tenía que viajar sí o sí, ya que la navidad de ése año la pasé trabajando; el puto pasaje me costó 100 lucas (soles, moneda nacional), de lo que normalmente está 40 soles. faltando un minuto para media noche llegué a la puerta, con la emoción de volver a ver a mi familia no reparé en nada de lo que hubiera en el barrio; en fin, la cena, el pavo, la familia, los abrazos y el llanto...el hijo pródigo volvió pero sólo para comer y festejar. Al día siguiente me doy cuenta que la muy bendita pista de la esquina estaba de mal en peor, habían abierto la tierra y todo era un desastre...pasaron las festividades y a regresar a Lima, la ciudad de los Reyes pero del desastre.

Huancayo, marzo 2009; las cosas no fueron desarrollándose como esperaba, la vida no es tan fácil como pensaba, así que el hijo pródigo decidió regresar a casa, esta vez para quedarse; inicié una nueva vida, retomé viejas amistades y volví a frecuentar a mi grupo de seudo intelectuales (les pido no se molesten por lo de seudos...el único seudo acá soy yo); e inicié una nueva relación; el barrio de ella, tampoco había conocido el progreso (su calle tampoco estaba asfaltada); nos acercábamos a agosto, en la casa de ella también les llegó un regalo, abrieron la tierra para hacer la pista...por cuestiones de la vida o mejor dicho del ex, terminamos.

Huancayo, abril 2010; traté de volver a mi vida, ella me dejó de importar, nuestra relación no pasaba a más de mensajes por correo en la que reclamaba algunas cosas; viajes, trabajos, paseos y soledades, mientras que la porquería de mi pista a asfaltar seguía igual, ya van casi dos años y nada, me enteré que ni siquiera el gran alcalde chamba pone el 50% de la inversión, práctica mente los vecinos se pagaron su modernidad.

Volví a verla, me invitó una fecha a su casa y oh sorpresa en menos de medio año ellos ya tenían la modernidad que en mi casa querían y así mi "estimado alcalde chamba" populista y chamullador, me tiene cojudo con auto llamarse alcalde chamba...ya estamos en el mes de junio y recién pasaron la aplanadora, y recién están empezando a pavimentar después de casi dos años....
ya pues alcalde chamba, sea chamba y no demore tanto en sus obras...más criterio en sus "parques" que no son más que relleno a su campaña política de politiquero.

Adrián Domínguez Chávez "SOTTOOMBRA"

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es una buena catarsis de nuestra realidad.